Effects of droughts on daily mortality in Iberian Peninsula: risks and vulnerability
DATE:
2020-12-04
UNIVERSAL IDENTIFIER: http://hdl.handle.net/11093/1647
DOCUMENT TYPE: doctoralThesis
ABSTRACT
The prestigious 2018 Lancet report on climate and health "The Lancet Countdown: tracking progress on health and climate change" begins with the devastating phrase "The World Health Organization (WHO) estimated that in 2012 12.6 million deaths (23% of all the deaths in the world) were attributable to modifiable environmental factors, many of which could be influenced by climate change or be related to driving forces of climate change" (Watts et al., 2017). These cold WHO numbers confirm that the research on the relationship of climatic factors on health should be a priority issue for public health services, especially considering that climate change already observed and the foreseeable will act as a multiplying factor of the threat to global health.
Climate change projections indicate that droughts will be more frequent and intense in the 21st century in several regions in the world, such as Southern Europe (e.g., Stewart et al., 2015, Ebi and Bowen, 2016; Sapionini et al., 2017, Guerreiro et al., 2018; Wang et al., 2018, WHO,2018; Zhaoli et al., 2018), involving a greater threat to the health of the population given that droughts are widely considered as the most complex, costly and destructive climatic extremes that affect more people than any other climatic event, being responsible for a notable burden of morbidity and mortality worldwide (Willhite, 2000; Kallis et al., 2008; Stanke et al., 2013; Sena et al., 2015). In recent years up to 50 million people per year have suffered intense droughts. However, droughts are also the least understood events due to the complexity in assigning their onset and end of the events as well as the indirect, diffuse and accumulated effects in time. There are hardly studied focused on the analysis of the details on the links between drought and health effects and there are rather fewer assessments focused on the evaluation of what measures and characteristics of droughts are the most predictive to reflect health effects. In this context, Iberian Peninsula (southwestern Europe) is a region prone to droughts, where this meteorological extreme is described as the main hydroclimatic phenomena. Several studies have indicated that the magnitude and frequency of droughts have increased during the last few decades in the most of territory (Vicente Serrano y Cuadraprats, 2007; Vicente Serrano et al., 2011; Páscoa et al., 2017) and attending to climate change projections, in this territory droughts will likely become more severe and intense during 21st century. (Vicente Serrano, 2014). For first time, in this PhD work a diagnostic study of daily time series will be carried out in the last three decades about the effects of droughts on daily natural, circulatory and respiratory-cause mortality. The performance of different drought indices will be compared to estimate the health risks associated to droughts, and the vulnerability among the exposed population will be also analysed (different sex and advance age groups). Moreover, the short-term effects of heatwaves and atmospheric pollution will be additionally controlled. El prestigioso informe de Lancet sobre clima y salud “The Lancet Countdown: tracking progress on health and climate change” de este año 2018 comienza con la demoledora frase “La Organización mundial de la salud (OMS) estimó que en 2012 12,6 millones de muertes (23% de todas las muertes en el mundo) fueron atribuibles a factores ambientales modificables, de los cuales muchos de ellos podrían estar influenciados por el cambio climático o estar relacionado con fuerzas impulsoras del cambio climático” (Watts et al., 2017). Estos fríos números de la OMS lo que hacen es constatar que la investigación sobre relación de factores climáticos sobre la salud debe de ser un tema prioritario para los servicios públicos de salud sobre todo teniendo en cuenta que el cambio climático ya observado y el previsible actuarán como factor multiplicador de la amenaza a la salud global.
Las proyecciones de cambio climático indican que las sequías serán más frecuentes e intensas en el siglo XXI en varias regiones del mundo, como el Sur de Europa y cuenca mediterránea (e.g., Stewart et al., 2015, Ebi and Bowen, 2016; Sapionini et al., 2017, Guerreiro et al., 2018; Wang et al., 2018, WHO,2018; Zhaoli et al., 2018), suponiendo una mayor amenaza para la salud de la población. dado que las sequías son ampliamente consideradas como los extremos climáticos más complejos, costosos y destructivos que afectan a más personas que cualquier otro evento climático, siendo responsables de una notable carga de morbilidad y mortalidad a nivel global (Obasi, 1994; Willhite, 2000; Kallis et al., 2008; Stanke et al., 2013; Sena et al., 2014). En los últimos años hasta 50 millones de personas por año han sufrido sequías intensas. Sin embargo, las sequías también son los eventos menos entendidos dada la complejidad en asignar comienzo y fin de sus eventos y la naturaleza indirecta de sus efectos acumulados en el tiempo. Apenas hay trabajos que analicen los detalles entre los vínculos entre la sequía y sus efectos en salud y muchos menos que evaluen qué medidas y caracteristicas de las sequías son las más predictivas para reflejar los efectos de este extremo hidroclimático en la salud. En este contexto, la Península Ibérica (Suroeste Europa) es una región propensa a la sequía, considerada como el principal fenómeno hidroclimático. Varios estudios han indicado que en las últimas décadas la ocurrencia y magnitud de las sequías ha incrementado en las últimas décadas (Vicente Serrano y Cuadraprats, 2007; Vicente Serrano et al., 2011; Páscoa et al., 2017) y de acuerdo con las proyecciones de cambio climático probablemente sean más severas e intensas en este territorio a lo largo del siglo XXI como resultado de una pronunciada disminución de precipitación e incremento de temperatura (Vicente-Serrano et al., 2014). Por primera vez, en este trabajo doctoral se hará un estudio de diagnóstico de series temporales en las últimas tres décadas sobre los efectos de la sequía sobre la mortalidad diaria por causas naturales, circulatorias y respiratorias de mortalidad diaria. Se comparará el rendimiento de diferentes indices de sequía en la estimación de los riesgos de las sequías en la salud, evaluando la vulnerabilidad entre la población expuesta (diferente sexo y grupos de avanzada edad). También se controlará adicionalmente el efecto a corto plazo de las olas de calor y la contaminación atmosférica. O prestixioso informe de Lancet sobre clima e saúde “The Lancet Countdown: tracking progress on health and climate change” deste ano 2018 comenza coa demoledora frase “A Organización mundial da saúde (OMS) estimou que en 2012 perto de 12,6 millóns de mortes (23% de todas as muertes no mundo) foron atribuibles a factores ambientais modificables, dos cales moitos deles poderían estar influenciados polo cambio climático ou estar relacionado con forzas impulsoras do cambio climático” (Watts et al.,2017 ). Estos fríos números da OMS o que fan é constatar que a investigación sobre relación de factores climáticos sobre a saúde debe de ser un tema prioritario para os servicios públicos de saúde sobre todo tendo en conta que o cambio climático xa observado e o previsible actuarán como factor multiplicador da ameaza á saúde global.
As proxeccións de cambio climático indican que secas serán máis frecuentes e intensas no século XXI en varias rexións do mundo, como o Sur de Europa (e.g., Stewart et al., 2015, Ebi and Bowen, 2016; Sapionini et al., 2017, Guerreiro et al., 2018; Wang et al., 2018, WHO,2018; Zhaoli et al., 2018), supoñendo unha maior ameaza para a saúde da población, dado que as secas son ampliamente consideradas como os extremos climáticos máis complexos, custosos e destrutivos que afectan a máis persoas que calquera outro evento climático, sendo responsables dunha notable carga de morbilidad e mortalidad a nivel global (Willhite, 2000; Kallis et al., 2008; Stanke et al., 2013; Sena et al., 2014). Nos últimos anos ata 50 millóns de persoas por ano teñen sofrido sacas intensas. Con todo, as secas tamén son os eventos menos entendidos dada a complejidad en asignar comezo e fin dos seus eventos e a natureza indirecta dos seus efectos acumulados no tempo. Apenas hai traballos que analicen os detalles entre os vínculos entre a seca e os seus efectos en saúde e moitos menos que evaluen qué medidas e características das secas son máis predictivas para reflectir os efectos deste extremo hidroclimático na saúde. Neste contexto, a Península Ibérica (Suroeste de Europa) é unha rexión propensa ás seca, consideranda como o principal fenómeno hidroclimático. Varios estudos indicaron que nas últimas décadas a ocurrencia e magnitude das secas incrementou nas últimas décadas (Vicente Serrano y Cuadraprats, 2007; Vicente Serrano et al., 2011; Páscoa et al., 2017) y atendendo as proxeccións de cambio climático probablemente sexan máis severas e intensas neste territorio ao longo do século XXI como resultado dunha pronunciada disminución de precipitación e incremento de temperatura (Vicente-Serrano et al., 2014). Por primera vez, neste traballo doctoral farase un estudo de diagnóstico de series temporais nas últimas tres décadas sobre os efectos da seca sobre a mortalidad diaria por causas naturais, circulatorias e respiratorias. Compararase o rendemento de diferentes indices de seca na estimación dos riscos das secas na saúde, evaluando a vulnerabilidade entre a poboación exposta (diferente sexo e grupos de avanzada idade). Tamén se controlará adicionalmente o efecto a curto prazo das olas de calor e a contaminación atmosférica.
Files in this item
![pdf [PDF]](/xmlui/themes/Mirage2/images/thumbnails/mimes/pdf.png)
- Name:
- SalvadorGimeno_Coral_TD_2020_v ...
- Size:
- 34.19Mb
- Format:
- Description:
- Versión pública